El Alfonso XIII, encargado por la Compañía Trasatlántica, fue el primer barco construido en los astilleros de La Naval de Sestao y fue botado en 1920, siendo el mayor buque en la península hasta ese momento. Con un pasaje de 1.809 personas, tenía 14.000 toneladas de arqueo, 146,30 metros de eslora, 18,6m. de manga, un puntal de 10,9 m y un calado de 6,3 m. Estaba movido por dos turbinas de vapor, tenía dos hélices que desarrollaban una potencia de 10.700 caballos, y alcanzaba una velocidad de 19,5 nudos (36,11 km/h)
En abril de 1931 el Alfonso XIII pasó a ser llamado Habana y fue dedicado al transporte de carga y viajeros.
En 1936 dio cobijo a personas provenientes del frente de Gipuzkoa. En 1937 fue utilizado como hospital y, finalmente, realizó seis viajes de evacuación masiva de miles de niñas y niños desde Santurtzi en 1937. El vapor Habana permaneció amarrado en Burdeos, donde sirvió como buque-hospital hasta el fin de la guerra.
En 1961 fue transformado en buque factoría-congelador y rebautizado como Galicia. Estuvo en servicio hasta 1975 y fue desguazado en Vigo en 1978.