Transporte de Mineral
El traslado del mineral hasta la ría estaba resuelto con ferrocarriles mineros, que servían tanto a las siderurgias ya instaladas, como a las compañías extranjeras que lo transportaban por mar. El transporte del mineral en barco, a su vez, demandaba diques para reparaciones, suministros navales, calderería, maquinaria, astilleros, velamen, jarcia y cordelería, etc.
Las mejoras técnicas en la navegación, el vapor y la hélice, proporcionaron mayor seguridad y navegabilidad a las embarcaciones, lo que propició el desarrollo de líneas regulares y el despliegue de las compañías navieras. Estas demandaban más metros de muelle para atracar, más superficie para descargar, y mejor utillaje para abaratar las estadías. Todo el despliegue para la extracción de mineral demandaba, además, maquinaria, talleres de mecánica, industria metalúrgica, tornillería, herramientas, madera, etc.
La exportación masiva de mineral de hierro no evidencia ningún tipo de desarrollo industrial, pero, unida a la siderurgia implantada en la cuenca del Nervión, ejerció un profundo e intenso efecto de arrastre sobre el resto de la economía. Esto generó un efecto multiplicador que modificó la estructura económica del territorio, propiciando el desarrollo de aquellos sectores industriales que protagonizaron, en la primera década del siglo XX, la consolidación del desarrollo industrial en Bizkaia.